Llevará un largo tiempo para los catalanes digerir la inadmisible derrota de este viernes en Lisboa. El 2-8 dejó demasiada tela para cortar, Piqué dijo que "nadie es imprescindible", se ofreció para dejar el club y por segunda vez en el año, la dirigencia deberá buscar DT: Setién no dirigirá más al equipo. ¿Aires de cambios en el Camp Nou?
Nada pudo hacer un frágil, dubitativo y apático Barcelona ante el poderoso Bayern Múnich, que esta tarde en Lisboa le propinó un lapidario 8-2 por los cuartos de final de la Champions League, eliminándolo de la competencia y además sumergiendo a los culés en una crisis institucional que parece no tener salida.
Esta tarde noche, en la "burbuja" de la capital portuguesa, el equipo azulgrana volvió a recibir ocho goles en un partido después de 74 años. La última vez fue en la ida de los octavos de final de la Copa de España de 1946, cuando cayó 0-8 a manos del Sevilla.
Como si esto fuera poco, la escandalosa derrota de este viernes a manos de los bávaros fue la peor de los culés en una competencia europea a lo largo de su historia. Además, se trató de la sexta ocasión en sus 131 años de vida en recibir ocho goles en un mismo cotejo, y primera vez en encajar dicha cantidad de goles en un partido por Champions.
El último antecedente de Messi y compañía siendo goleados en la máxima competencia europea databa de la temporada 2012/13, justamente frente al Múnich, que lo derrotó 4-0 en el Allianz Arena y una semana más tarde decoró el resultado con un contundente 3-0 en el Camp Nou, sellando el global por 7-0.
Primeros coletazos de la derrota. Una hora después del 2-8, la dirigencia culé encabezada por Josep Bartomeu despidió de su cargo al DT Quique Setién, quien había asumido la dirección técnica en enero último tras la salida de Ernesto Valverde, pero que en apenas siete meses sufrió duros golpes, como por ejemplo una temprana eliminación en la Copa del Rey, la liga BBVA perdida en la recta final a manos del Real Madrid y el doloroso adiós en la Champions esta tarde como consecuencia del traspié frente al Bayern.
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