El Millonario derrotó 2-0 a Estudiantes de Caseros en Córdoba y llegó a su 15ª final en la era Gallardo. Pinola abrió el marcador de cabeza y en la última jugada del partido, Palacios selló el triunfo con una corrida épica.
Sí, River llegó a nueva final. Y lo consiguió a su manera, a lo River. Porque el equipo dirigido por Marcelo Gallardo, acostumbrado a las definiciones mano a mano, hoy volvió a sacar chapa de su mística y se abrochó otra final en el horizonte, la segunda que afrontará hasta el cierre del 2019.
Con goles de Javier Pinola y Exequiel Palacios, el "Millonario" derrotó 2-0 a Estudiantes de Caseros ante una multitud en el Mario Alberto Kempes y así logró sacar pasaje a la definición de la Copa Argentina, que afrontará en fecha -sería el 30 de este mes pero la correrían para la primera semana de diciembre- y sede aún a definir, ante Central Córdoba de Santiago del Estero, la revelación del torneo, y que hoy borró a Lanús de la competencia.
Los dirigidos por el Muñeco no exhibieron un gran juego ni tampoco fue vistoso desde el punto de vista técnico, pero aún así supo cómo lograr abrir el marcador cuando las cosas no marchaban de la mejor manera. El 1-0 llegó a través de un penal ejecutado por Nicolás De La Cruz, que envió al área una pelota que Lucas Martínez Quarta desvió de cabeza para que su compañero de zaga, el experimentado Pinola defina con su pierna derecha para provocar el delirio de las más de 42 mil almas millonarias que dijeron presente en Córdoba.
Fue exactamente en la última jugada de la parte inicial y luego de 45 minutos en que su rival, el Pincha de Caseros, trató de cerrarle la mayor cantidad de espacios posibles y así evitar que lleve peligro al arco de Facundo Altamirano, que terminó viendo su valla vencida en la última pelota de los primeros 45 minutos.
Ya en el segundo tiempo, ambos equipos volverían a cruzarse en un partido bravo, de fuerte presencia en el mediocampo y los atacantes intentando encontrar esas pelotas que los delanteros siempre necesitan. Al igual que en la primera etapa, Estudiantes probó nuevamente con neutralizar a los jugadores de mejor pie de River, cuyo DT Gallardo apostó por los ingresos de un delantero de referencia como Ignacio Scocco y dos jugadores de buen pie y habilidad para romper líneas como Juan Fernando Quintero y Jorge Carrascal.
Luego de una jugada que seguramente será tema de análisis -Armani dejó una pelota muerta en el área chica que el rival convirtió en gol pero el árbitro Vigliano lo anuló- Estudiantes contó con una última situación de gol, esta vez con un córner, que no fue ejecutado de la mejor manera y terminó desencadenando en una habilitación de Quintero para que Exequiel Palacios encabece otra épica corrida casi calcada con la del Pity Martínez ante Boca en Madrid, y sin arquero, defina el partido: 2-0, triunfo ante una multitud y pase a la final para el Millonario.
Con este resultado, los de Núñez llegaron a su 15ª final en 5 años, desde que Gallardo asumió la dirección técnica. De esas ganó 10, perdió 3 y aún le restan 2 por jugar: por Copa Libertadores, el próximo sábado 23 ante el Flamengo en Lima, y días después, Copa Argentina ante el Ferroviario, en fecha a definir, aunque se prevé que será el miércoles 4 o jueves 5 de diciembre y en el Malvinas Argentinas de Mendoza.
Sí, River llegó a nueva final. Y lo consiguió a su manera, a lo River. Porque el equipo dirigido por Marcelo Gallardo, acostumbrado a las definiciones mano a mano, hoy volvió a sacar chapa de su mística y se abrochó otra final en el horizonte, la segunda que afrontará hasta el cierre del 2019.
Con goles de Javier Pinola y Exequiel Palacios, el "Millonario" derrotó 2-0 a Estudiantes de Caseros ante una multitud en el Mario Alberto Kempes y así logró sacar pasaje a la definición de la Copa Argentina, que afrontará en fecha -sería el 30 de este mes pero la correrían para la primera semana de diciembre- y sede aún a definir, ante Central Córdoba de Santiago del Estero, la revelación del torneo, y que hoy borró a Lanús de la competencia.
Los dirigidos por el Muñeco no exhibieron un gran juego ni tampoco fue vistoso desde el punto de vista técnico, pero aún así supo cómo lograr abrir el marcador cuando las cosas no marchaban de la mejor manera. El 1-0 llegó a través de un penal ejecutado por Nicolás De La Cruz, que envió al área una pelota que Lucas Martínez Quarta desvió de cabeza para que su compañero de zaga, el experimentado Pinola defina con su pierna derecha para provocar el delirio de las más de 42 mil almas millonarias que dijeron presente en Córdoba.
Fue exactamente en la última jugada de la parte inicial y luego de 45 minutos en que su rival, el Pincha de Caseros, trató de cerrarle la mayor cantidad de espacios posibles y así evitar que lleve peligro al arco de Facundo Altamirano, que terminó viendo su valla vencida en la última pelota de los primeros 45 minutos.
Ya en el segundo tiempo, ambos equipos volverían a cruzarse en un partido bravo, de fuerte presencia en el mediocampo y los atacantes intentando encontrar esas pelotas que los delanteros siempre necesitan. Al igual que en la primera etapa, Estudiantes probó nuevamente con neutralizar a los jugadores de mejor pie de River, cuyo DT Gallardo apostó por los ingresos de un delantero de referencia como Ignacio Scocco y dos jugadores de buen pie y habilidad para romper líneas como Juan Fernando Quintero y Jorge Carrascal.
🎙️ "Estamos viviendo un momento histórico. Ojalá sigamos teniendo la posibilidad de conseguir títulos, estamos orgullosos y el hincha también lo está".#JuntosSomosMasGrandes pic.twitter.com/9O1uckFY64— River Plate (@RiverPlate) November 15, 2019
A flor de piel. Así vivió Gallardo la clasificación a una nueva final con sus dirigidos.
Luego de una jugada que seguramente será tema de análisis -Armani dejó una pelota muerta en el área chica que el rival convirtió en gol pero el árbitro Vigliano lo anuló- Estudiantes contó con una última situación de gol, esta vez con un córner, que no fue ejecutado de la mejor manera y terminó desencadenando en una habilitación de Quintero para que Exequiel Palacios encabece otra épica corrida casi calcada con la del Pity Martínez ante Boca en Madrid, y sin arquero, defina el partido: 2-0, triunfo ante una multitud y pase a la final para el Millonario.
Con este resultado, los de Núñez llegaron a su 15ª final en 5 años, desde que Gallardo asumió la dirección técnica. De esas ganó 10, perdió 3 y aún le restan 2 por jugar: por Copa Libertadores, el próximo sábado 23 ante el Flamengo en Lima, y días después, Copa Argentina ante el Ferroviario, en fecha a definir, aunque se prevé que será el miércoles 4 o jueves 5 de diciembre y en el Malvinas Argentinas de Mendoza.
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