El Pirata no detiene su marcha triunfal y la semana próxima podría asegurarse la vuelta a Primera.
La goleada 4-1 de Belgrano ante Tristán Suárez, el último domingo en Alberdi, dejó al Celeste muy cómodo en la tabla de posiciones con 67 puntos a falta de cinco fechas para el final del torneo de la Primera Nacional, que otorgará dos ascensos a Primera División.
Y como si esto fuera poco, este lunes, el Pirata volvió a recibir un empujoncito en miras a su ilusión de regresar a la elite del fútbol argentino luego de que San Martín de Tucumán empate sin goles en condición de visitante frente a Deportivo Riestra. Es que con el 0-0 de esta tarde, el Ciruja quedó 2° en la tabla con 56 puntos, misma cantidad que Instituto pero con mejor diferencia de gol (+20 vs. +15), pero lejos del Celeste.
Dicho esto, los de Alberdi, que aventajan por 12 puntos a los tucumanos, podrán regresar a Primera el próximo lunes, aunque para ello deberán darse una combinación de resultados.
La primera es que Instituto no gane el próximo sábado cuando reciba a Gimnasia de Jujuy en Alta Córdoba, a partir de las 20.40. La otra, que el propio Belgrano gane en La Ciudadela el próximo lunes cuando visite a, justamente, San Martín, desde las 21.10.
Palabras más, palabras menos, si Instituto deja puntos en el camino y el Pirata gana en Tucumán, habrá ascenso celeste. De no ocurrir esto, podrá darse la vuelta a Primera en la fecha 34 cuando los dirigidos por Guillermo Farré reciban a Defensores de Belgrano. En esa fecha, San Martín visitará a Villa Dálmine e Instituto, a Flandria.
La última vez que Belgrano jugó un partido oficial de Primera División fue el 7 de abril de 2019, más de tres años atrás, cuando derrotó 1-0 a Godoy Cruz por la última fecha de la Superliga 2018-19. Aquel domingo, el Pirata tenía mínimas, pero chances al fin de mantener la categoría, y pese a que ganó con gol de Mauricio Cuero, una combinación fatal de resultados terminaron por decretar el descenso del Pirata, en aquel entonces dirigido por Diego Osella, con Juan Carlos Olave como manager y Jorge Franceschi ocupando el rol de presidente. Al igual que Belgrano, en aquella temporada descendieron San Martín de San Juan, su homónimo de Tucumán y Tigre.
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